AUTORRETRATO EN EL ESPEJO |
Este año no me ha sido posible estar en Zaragoza para el día de San Jorge, de modo que aquí os dejo las fotografías que tenía guardadas en archivo y que no fueron publicadas en su día.
LA ESCRITORA CARMEN SANTOS DEDICÁNDOME SU NOVELA CUBANA "EL SUEÑO DE LAS ANTILLAS".
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EL ESCUDO DE ARAGÓN |
UN DULCE RELLENO QUE HACE LAS DELICIAS A LOS NIÑOS, REPRESENTANDO AL DRAGÓN DE SAN JORGE. |
LA MÚSICA, COMPAÑERA DE LOS DÍAS FESTIVOS. |
Hace unos años hice esta foto a la fachada de la Universidad de Alcalá de Henares, donde el año pasado, J. Goytisolo recibió el premio Cervantes e hizo su reivindicativo discurso.
Por si alguien no lo ha escuchado, a continuación dejaré por escrito sus palabras.
El escritor se refiere y diferencia a los literatos, a los escritores a secas, a incurables aprendices de escribidor y también alude a los parásitos de la literatura.
"Cuando se escribe hay que cumplir consigo mismo",
"El señuelo de la fama es absurdo",
"Ser objeto de halagos por la institución literaria me lleva a dudar de mí mismo"
y nos habla de la verdad de las críticas y la ejemplar honradez de los condenados al exilio.
Cervantes |
"Mi instintiva reserva a los nacionalismos de toda índole (...) me ha llevado a abrazar la nacionalidad cervantina".
El buen Sancho, siempre encontrará un refrán.
Sancho Panza |
"Imagino al Hidalgo manchego acometido (...) contra los esbirros (....) que proceden al desalojo de los desahuciados."
Socorrer a los miserables, es empresa de los caballeros andantes, también lo dijo Goytisolo, preocupado por la proliferación de las guerras, la pobreza, el hambre, la injusticia, las luchas, y nos habló de la ingeniería financiera, de las identidades religiosas que sienten amenazadas sus esencias y credos, de las verjas de Ceuta y de Melilla,, inmigrantes cuyo único delito es el instinto de vida y el ansia de libertad. No pudo decirlo más claro en su discurso cuando mencionó a los corruptos, al mundo aquejado de paro, a la precariedad, a las desigualdades sociales y al exilio profesional de los jóvenes. Habló como bien dijo: "a la llana y sin rodeos".
Don Quijote |